Ene. 25 de septiembre de 2005-Ser obeso o aumentar de peso puede aumentar el riesgo de desarrollar cálculos renales dolorosos, y las mujeres pueden ser especialmente vulnerables a estos riesgos adicionales, según un nuevo estudio.
Los investigadores encontraron que las mujeres que pesaban más de 220 libras tenían un 90% más de probabilidades de desarrollar cálculos renales que aquellas que pesaban menos de 150 libras. Los hombres y las mujeres que ganaron más de 35 libras desde que tenían 21 años de edad también tuvieron un riesgo de 39 a 82% más alto de cálculos renales.
Los cálculos renales están hechos de sales, minerales y otras sustancias que normalmente se encuentran en la orina. Cuando el equilibrio normal de agua y otras sustancias está desequilibrado, como por ejemplo por deshidratación, estas sustancias se pegan y se acumulan para formar piedras. A medida que los cálculos atraviesan el sistema urinario, pueden causar dolor repentino e intenso, náuseas y vómitos, y sangre en la orina.
Los investigadores estiman que el 10% de los hombres y el 5% de las mujeres desarrollan cálculos renales durante su vida, y se gastan más de 2 2 mil millones cada año en el tratamiento de la afección dolorosa.
Aunque un IMC (índice de masa corporal, una medida de peso en relación con la estatura utilizada para indicar obesidad) y la resistencia a la insulina pueden aumentar la cantidad de calcio y otras sustancias en la orina, los investigadores dicen que pocos estudios han analizado la asociación entre la obesidad y/o el aumento de peso y el riesgo de desarrollar cálculos renales.