Los riñones filtran la sangre y ayudan a eliminar los desechos y el exceso de líquido del cuerpo. Los riñones también ayudan a controlar el equilibrio químico del cuerpo.
Los riñones son parte del sistema urinario, que incluye los uréteres, la vejiga y la uretra.
Los cambios musculares y en el sistema reproductor pueden afectar el control de la vejiga.
CAMBIOS POR EL ENVEJECIMIENTO Y SUS EFECTOS EN LOS RIÑONES Y LA VEJIGA
A medida que envejece, los riñones y la vejiga cambian. Esto puede afectar su función.
Cambios en los riñones que ocurren con la edad:
- La cantidad de tejido renal disminuye y la función renal disminuye.
- El número de unidades de filtrado (nefronas) disminuye. Las nefronas filtran el material de desecho de la sangre.
- Los vasos sanguíneos que irrigan los riñones pueden endurecerse. Esto hace que los riñones filtren la sangre más lentamente.
Cambios en la vejiga:
- La pared de la vejiga cambia. El tejido elástico se vuelve más rígido y la vejiga se vuelve menos elástica. La vejiga no puede contener tanta orina como antes.
- Los músculos de la vejiga se debilitan.
- La uretra puede bloquearse parcial o totalmente. En las mujeres, esto puede deberse a músculos debilitados que hacen que la vejiga o la vagina se caigan de posición (prolapso). En los hombres, la uretra puede bloquearse por un agrandamiento de la glándula prostática.
En una persona de edad saludable, la función renal disminuye muy lentamente. Las enfermedades, los medicamentos y otras afecciones pueden degradar significativamente la función renal.
PROBLEMAS COMUNES
El envejecimiento aumenta el riesgo de problemas renales y de vejiga, como:
- Problemas de control de la vejiga, como fugas o incontinencia urinaria (no poder retener la orina), o retención urinaria (no poder vaciar completamente la vejiga)
- Infecciones de la vejiga y otras vías urinarias (TIs)
- Enfermedad renal crónica
CUÁNDO PONERSE EN CONTACTO CON UN PROFESIONAL MÉDICO
Llame a su proveedor de atención médica de inmediato si presenta alguno de los siguientes síntomas:
- Signos de infección del tracto urinario, como fiebre o escalofríos, ardor al orinar, náuseas y vómitos, cansancio extremo o dolor en el costado
- Orina muy oscura o sangre fresca en la orina
- Dificultad para orinar
- Orinar con más frecuencia de lo habitual (poliuria)
- Necesidad repentina de orinar (urgencia urinaria)
A medida que envejezca, tendrá otros cambios, como:
- En los huesos, músculos y articulaciones
- En el sistema reproductivo masculino
- En el sistema reproductivo femenino
- En los órganos, tejidos, células y
