Ver teléfono y cómo llegar al Jardín Botánico de Brooklyn
El Jardín Botánico de Brooklyn es un escape natural a la vida urbana de Nueva York
Cuando sales de la parada de metro de Eastern Parkway en Brooklyn, la última que imaginas es que a unos pocos pasos hay un extenso jardín botánico. El Jardín Botánico de Brooklyn está a sólo cinco minutos andando desde la boca del metro y merece mucho la pena si sales de Manhattan. El día que fui a visitar los jardines, era un día entre semana a principios de primavera y los jardines estaban relativamente vacíos, así que tuve el tiempo para pasear sin prisa.
Cuando entras en los jardines, te dan un mapa gratis, así que os sugiero que decidáis vuestra ruta primero porque hay muchos rincones y sendas y es muy fácil perderse algo o salirse del camino. Empecé mi visita viendo los cerezos que se encuentran alrededor de un lago artificial. Tengo que admitir que me quedé un poco decepcionada porque los arboles, aunque eran muy bonitos, se encontraban al lado de un tipo de construcción al estilo japonés que asemejaban aquello a la zona Epcot de Disney World con todos los países. Aun así, el estanque y los jardines estaban diseñados especialmente para este jardín botánico de Brooklyn al estilo bastante tradicional. El estanque forma el símbolo japonés de la palabra «corazón» y los pinos simbolizan la longevidad. También hay muchas rocas colocadas con cuidado ya que creen que llevan la energía vital además del significado religioso.
Desde los jardines japoneses seguí mi camino por el Jardín Botánico de Brooklyn hasta la zona de cerezos. Esta parte habría sido más impresionante si hubiera tenido la oportunidad de visitarlos unas semanas más tarde,ya que los arboles sólo estaban empezando a florecer. Me encontré con algunas personas sacando fotos, pero en general, la zona estaba vacía aparte de una clase de niños de infantil. Lo que más me sorprendió fue la cantidad de tipos distintos de cerezos y flores. Será que nunca me había parado de pensar en la cantidad de cerezos que existen realmente. Unas semanas más tarde, seguro que la senda hubiera sido una manta de flores rosas y blancas dignas de ser el fondo de cualquier cuento de hadas.
Seguí mi camino pasando por los narcisos y sus nuevas caras blancas y amarillas sonriéndome hasta que llegué a lo que parecían ser dos casitas hechas de paja. Resultó que era parte de una instalación de arte hecha por el artista Patrick Dougherty. Este artista combinó su pasión por la naturaleza y por la arquitectura para crear unas estructuras usando materiales naturales. Lo que más me gustó fue que podías entrar en las casitas y hasta sentarse dentro imaginando estar en otra época, en algún tipo de comunidad de la jungla rodeado por la naturaleza. Es algo tan ajeno al céntrico Nueva York que la presencia misma de una instalación artística así, me hizo feliz.
Pasé al lado del centro de visitantes, que se encuentra en un edificio parecido a un invernadero, aunque decidí no entrar. No soy muy buena con las plantas, pero parecía que se podía comprar semillas en la tienda (si se te da bien las plantas, claro está). Delante del edificio de vidrio había una fuente apagada y filas de tulipanes rosas y amarillos. Fue entonces cuando saqué mi mapa para decidir qué camino seguir (como ya he mencionado, es muy fácil perder se algo si te descuidas).
Pasé por el jardín de hierbas y otro de rocas y musgo que me hizo sentir transportada fuera de la ciudad. Allí me crucé con otro grupo de niños de infantil admirando el estanque e intentando investigar todo para frustración de sus profes. También encontré una senda con los nombres de los famosos que habían donado dinero a los jardines (la mayoría de ellos nativos de Nueva York que querían devolver algo a su comunidad). Y, al final de mi visita, encontré un jardín inglés con flores de colores tan vivos que casi no podía evitar sentirme inspirada por la naturaleza.
Ruskomendamos una visita a los Jardines Botánicos de Brooklyn con 5 boquerones. Es un sitio que, aunque un poco más pequeño que los Jardines Botánicos del Bronx, merece una visita. Es un parque único rodeado de un ambiente urbano que te dejará más relajado y que te obligará a tomar las cosas con calma. Es el sitio perfecto para visitar con niños o con un grupo escolar, o para pasear con tu cámara- no te olvides las pilas- ya que habrá muchas oportunidades para sacar fotos. Si viajas a Nueva York, no te olvides de apuntar esta ruskomendación.
Información sobre el Jardín Botánico de Brooklyn
- Dirección: 990 Washington Ave, New York, NY
- Teléfono: (718) 623-7200
- Horario: Lunes cerrado; Martes-Viernes (8am-6pm); Sábados y Domingos (10am-6pm)
- Precio: Adultos $12; Estudiantes y Mayores de 65 años con documento $6; Niños menores de 12 años gratis.
- Cómo llegar: Líneas de Metro 2,3 (hacia Flatbush Av – Brooklyn College; Parada Eastern Pkwy – Brooklyn Museum),Q (hacia Coney Island – Stillwell Av; parada Prospect Park),B (hacia Brighton Beach; parada Prospect Park)
- Web oficial del Jardín Botánico de Brooklyn