Las frutas, verduras y granos frescos son, en su estado natural sin procesar, kosher y pareve. No necesitan certificación de kashrut y se pueden usar con productos lácteos o carne. Sin embargo, una vez que un vegetal se combina con un producto lácteo o cárnico, se convierte en lácteo o carne, respectivamente.
Las verduras procesadas, como las enlatadas o congeladas, pueden tener un problema. A veces son cremosos y pueden contener ingredientes no saludables, lácteos o de carne; o pueden haber sido procesados en recipientes utilizados para productos cárnicos, lácteos y orevenos no kosher.
Un problema más común con las verduras es la posible infestación por insectos. La prohibición de consumir insectos, incluso tinyones, siempre y cuando sean visibles a simple vista, se menciona cinco veces en la Torá y es muy estricta. En los últimos años, debido a las regulaciones federales que restringen la fumigación con insecticidas y los cambios genéticos que hacen que algunos insectos se vuelvan más resistentes a los insecticidas, hay cantidades crecientes de insectos como trips y pulgones que infestan algunas verduras, especialmente variedades verdes y de hojas. Aunque son bastante pequeñas, son visibles a simple vista y deben ser removidas. Los áfidos varían en tamaño de 2 a 5 milímetros (1/16 – 1/8 de pulgada).
Muchas verduras, frutas, nueces y granos deben revisarse antes de cocinar o comer para detectar la presencia de insectos pequeños. Los paquetes de pasta también están infestados ocasionalmente. Algunos vegetales problemáticos particularmente graves son: artichokes, espárragos, coles de bruselas, coliflor y verduras de hoja.
El método de control depende de las verduras. Los vegetales de hojas, como la col y la lechuga, deben revisarse hoja por hoja. Lavarse con agua corriente o sumergirse en agua salada es útil, pero las verduras también deben inspeccionarse bajo una luz brillante, ya sea luz diurna o artificial.Ciertas verduras, como el apio y el calabacín, se pueden usar después de lavarlas con agua corriente y fregarlas con un cepillo para verduras.
El grado de presencia de insectos varía según la región, la estación y el origen del producto. Si se sabe que una determinada variedad está infectada, evítela para esa temporada o examínela con mucho cuidado para eliminar todos los insectos.