Daniel Delis Hill’s History of World Costume and Fashion (2011) explica la cosmética egipcia y el uso de kohl:
«Los cosméticos fueron usados tanto por mujeres como por hombres, especialmente para realzar los ojos y como protección contra el resplandor del sol. El delineador de ojos estaba hecho de kohl negro en polvo, un mineral de plomo, y las sombras de ojos se crearon con minerales pulverizados como malaquita, lapislázuli o turquesa.»(3)
Cuando los egipcios llevaban el kohl alrededor de sus ojos, tenían un estilo inusual de aplicarlo. Dibujaban líneas uniformes por encima y por debajo de los ojos y arqueaban ligeramente los extremos. Kohl fue tan significativo en toda la cultura que incluso las obras de arte representaban una cara con el delineador de ojos característico, como la momia de la figura 1. El famoso Busto de la reina Nefertiti (Fig. 2) representa a la reina Nefertiti con contornos negros audaces en sus ojos, lo que transmite que también empleó a kohl.
En La historia del Maquillaje: Belleza Clásica (2011), Gabriela Hernández proporciona información detallada sobre el maquillaje utilizado por mujeres egipcias adineradas, como kohl:
«La caja de tocador de una mujer egipcia adinerada a menudo contenía piedras pómez, aplicadores de pintura para los ojos, polvo mineral, paletas para mezclar colores y recipientes de polvo de colores. Estos incluían la malaquita mineral verde, el ocre rojo utilizado como colorante de labios y colorante de labios, y el delineador de ojos en polvo negro conocido como kohl hecho de hollín, galena y otros ingredientes.»(16)
Claramente, el uso de maquillaje facial y cosméticos no es un concepto nuevo. La Historia del Maquillaje: La belleza clásica permite imaginar a una mujer egipcia antigua realzando su belleza con productos como delineador de ojos, sombra de ojos, lápiz labial, etc. Incluso los recipientes de maquillaje, como el recipiente kohl de la figura 3, se parecen a los tubos de maquillaje contemporáneos.
En Fashions in Makeup from Ancient to Modern Times (2003), Richard Corson describe cómo los egipcios usaban cosméticos en cada parte de sus rostros, incluido el kohl en sus ojos:
«Cualquier otra cosa que los egipcios hicieran o no hicieran, rara vez no cubrían sus ojos con kohl, un polvo negro, gris o de color hecho de antimonio en polvo (estibio), óxido de manganeso negro, almendras quemadas, plomo, óxido negro de cobre, carbono, ocre marrón, óxido de hierro, malaquita y crisocola, un mineral de cobre azul verdoso. El polvo de kohl se mantuvo en macetas y tubos… humedecido con saliva, y se aplica con un kohl palo de marfil, madera, plata, vidrio o bronce… El kohl palo puede ser humedecido y se sumerge en el tubo o bote, o el polvo podría ser vertido en una cosméticos cuchara o plato y humedecido.»(9-10)
El Kohl era un elemento tan básico que era inevitable que los recipientes variaran, ya fueran similares a los tubos de maquillaje contemporáneos o pudieran compararse con macetas de plantas en miniatura. Las Figuras 4 y 5 muestran recipientes que se parecen a macetas, en los que puede haber sido más fácil mezclar y humedecer el kohl.