Aunque Kansas tiene una tasa de delitos violentos ligeramente superior al promedio nacional, muchas de sus ciudades son lugares muy seguros para vivir. De hecho, 14 ciudades de Kansas obtuvieron una puntuación positiva en nuestro Índice de Seguridad, lo que indica tasas favorables de delitos violentos y contra la propiedad. He aquí un vistazo más de cerca a las cinco ciudades más seguras del Estado de Sunflower, todas las cuales registraron tasas de delitos violentos por debajo del promedio nacional, mientras que 4 de cada 5 tienen tasas de delitos contra la propiedad por debajo del promedio nacional.
Leawood, una ciudad de poco más de 35K en el área metropolitana de Kansas City, tiene la tasa de delitos violentos más baja de todas las ciudades calificadas, lo que la convierte en la ciudad más segura de Kansas. Leawood registró solo 0,88 crímenes violentos por cada 1.000, lo que lo puso en gran compañía con comunidades de tamaño similar en todo el país.
Andover, un suburbio de tamaño modesto de Wichita, es la ciudad más segura #2 de Kansas, registrando una tasa de crímenes violentos menos de la mitad del promedio estatal. La tasa de delitos contra la propiedad de la ciudad es de 22.37 por 1K, que está por debajo del promedio nacional, es todo un logro en un estado con un alto nivel de delitos contra la propiedad.
El tercer lugar va para Derby, otro suburbio de Wichita, supera a Andover en tasa de delitos violentos y contra la propiedad, registrando una puntuación de Índice de seguridad ligeramente más baja debido a una menor proporción de empleados de las fuerzas del orden respecto a los residentes (2.57 vs.2.35). Sin embargo, ambas ciudades son comunidades muy seguras y favorables a la familia.
El cuarto lugar en el ranking pertenece a Lenexa, un gran suburbio en el área de Kansas City que registró una tasa de 1,68 por 1.000 delitos violentos y 17.46 por cada 1.000 delitos contra la propiedad. Estas estadísticas son muy impresionantes para una ciudad de más de 50.000 habitantes.
Quinto lugar, McPherson se encuentra en el centro de Kansas, lejos de las principales áreas metropolitanas. La pequeña ciudad registró una tasa de delitos contra la propiedad más alta que el promedio nacional, pero su tasa de delitos violentos de 2.05 por 1,000 es menor que los promedios estatales y nacionales.