La matanza kosher es el método de sacrificio de animales para carne prescrito en el judaísmo.
Las leyes reales de la matanza están en el Talmud (biblioteca judía de derecho oral y tradición). En la Torá (los primeros cinco libros del Antiguo Testamento escritos por Moisés) dice: «Matarás de tus rebaños y rebaños, como te ordené.»
La matanza kosher implica cortar la garganta de una manera que induce un sangrado rápido y completo y la muerte más rápida posible. Hay dos tipos de matanza kosher: Glatt y no Glatt. Solo en este último se practica el aturdimiento posterior al sacrificio. Esto no es aceptado por la comunidad ortodoxa de la corriente principal y está relacionado con salpicaduras de sangre.
Los requisitos más importantes del sacrificio kosher son:
- El sacrificio debe ser realizado por una persona especialmente entrenada conocida como «Shochet»
- El cuchillo (chalef) debe ser largo (16 pulgadas para el ganado vacuno y otros animales grandes y 12 pulgadas para las ovejas) y afilado como navaja, y debe usarse para sacrificar al animal en un solo movimiento ininterrumpido
- El cuchillo debe ser inspeccionado por el Shochet (la persona que sacrifica) para detectar la nitidez y el daño antes de sacrificar a cada animal
- Se debe dar una bendición antes de entrar en el piso de matanza
- Se debe cortar el esófago, la tráquea, las venas yugulares y las arterias carótidas sin dañar la médula espinal
- La sangre debe drenarse totalmente